INTRODUCCIÓN
Las terapias familiares, que comenzaron siendo a inicios de los años 60 provocativas experimentaciones, hace mucho están establecidas como verdaderas armas complementarias, y en ocasiones, de primera línea, en el abordaje clínico de cualquier paciente. Existen prestigiosas instituciones en el mundo que se dedican no sólo al tratamiento familiar, sino a la formación de nuevos terapeutas, a la edición de libros, revistas y videos docentes. Toda esa fuerza, unida en la diversidad, ha hecho posible que la Sociedad Internacional de Terapia Familiar sea una organización científica de peso y explica que haya podido reunir, por primera vez en América Latina, más de 1000 delegados.
Al Congreso de Guadalajara, celebrado en octubre de 1995, asistieron -o enviaron sus trabajos- la mayoría de los terapeutas familiares más importantes del mundo.
Por la connotación de este tema para los médicos de la familia y agentes comunitarios cubanos, hemos redactado un breve resumen de lo más actual y del futuro de la terapia de familias en el mundo.
CICLO VITAL
El ciclo vital “tradicional” comienza a verse como una historia de múltiples generaciones donde, definir etapas -en familias ampliadas- es un ejercicio a menudo complejo; el hecho de que convivan varios subsistemas, todos en diversas bases del ciclo, invita a que el terapeuta focalice qué subsistema de la familia ampliada será evaluado. Por otra parte, aumentan las familias monoparentales por divorcios y muerte de uno de los cónyuges. Ello ha hecho que los terapeutas estén trabajando intensamente con familias que no cumplen un ciclo vital “tradicional”. Por último, el aumento de la edad en los ancianos ha hecho que coincidan abuelos y bisabuelos en un espacio temporal familiar común. Los médicos de la familia y los terapeutas, deben tener en cuenta que un sistema con 2 subsistemas de gerontes proporciona una estructura y función bien distinta a la descrita en los textos tradicionales.
DIAGNOSTICO RELACIONAL
Hace varios años se viene insistiendo en la clasificación multiaxial de las enfermedades; esto es no ver la entidad como un hecho aislado, sin precipitantes, pronóstico y evolución. La doctora Florence Kaslow -Presidenta de la Sociedad Norteamericana de Terapia Familiar- planteó que el diagnóstico familiar debe ser una parte importante de la evaluación clínica para cualquier afección. Otros autores apoyan implícitamente el diagnóstico relacional con trabajos vinculados con áreas clínico-quirúrgicas específicas; hay abundante material sobre cáncer mamario e intervención familiar; enfermedad coronaria y dinámica de la familia; enfermedad terminal y solución del “duelo anticipado”.
En nuestra opinión, la importancia del diagnóstico relacional es que por primera vez hay consenso, en la mayoría de los terapeutas dedicados a la clínica, sobre la vinculación y complementaridad entre entidad individual y grupal y en esa dimensión, su inserción en un modelo médico más flexible y holístico.
PROBLEMAS CLÍNICOS CONCRETOS
La mayoría de los presentes se dedicaban a la práctica clínica. En orden de prioridades, para los terapeutas, parecen hallarse el SIDA, el cáncer y la depresión. El primer problema está siendo de muy difícil conducción por la complejidad de la entidad y su velado pronóstico, pero sobre todo, por las repercusiones a nivel de pareja, familia o grupos. Las tareas terapéuticas están centradas en clasificar la comunicación del sistema familiar, facilitar información desde el exterior y reequilibrar, tras el impacto, el funcionalismo del grupo. Las parejas homosexuales infestadas son motivo de consulta y tratamiento y se siguen los objetivos expuestos. En cuanto a las familias con un individuo afectado de cáncer, la tendencia actual es que se incorpore la entidad como una enfermedad crónica más. Se trabaja para evitar el “duelo anticipado” que a menudo ocurre. La depresión sigue siendo, junto a la esquizofrenia, la entidad individual de más motivos de consulta familiar. Las técnicas cognitivo- conductuales, ahora aplicadas a la familia, se reportan con muy buenos resultados.
ESCUELAS Y TECNICAS DE LOS ULTIMOS AÑOS
Por su difusión y grado de coherencia con el macrocosmos social de los años 90, el constructivismo está en la encrucijada de muchas escuelas de terapia. La terapia sistémica, cuyo fundamento fue establecido por Bowen y que los actuales Paul Dell y Mony Elkaim han engrandecido con los aportes de Prigogine -sistemas apartados del equilibrio- es una de las más estudiadas y aplicadas en el mundo. Ya mencionamos las técnicas cognitivo- conductuales en su uso familiar y ahora también se está promoviendo el empleo de programación neurolingüística para tratamiento familiar. El equipo reflexivo -reflexive team- ya ha sido utilizado por nosotros en Cuba. Consiste en trastocar el equipo de observadores con la familia en tratamiento y que estos últimos oigan y vean qué creen los que están detrás del espejo. Como técnica de tratamiento y sobre todo, de formación, es muy bien asimilada. El acercamiento narrativo a la familia está en no pocos trabajos de importancia clínica relevante.
PERSPECTIVAS
Todo parece indicar, que con el desarrollo mundial de la medicina comunitaria de acción preventiva, la técnica y la teoría de la terapia familiar se convertirán en un arma imprescindible de nuestros profesionales y paramédicos a ese nivel. Muchos planes de estudio contemplan nociones sobre familias pero aún falta un entrenamiento mínimo en el comportamiento de situaciones concretas. En nuestro país, los médicos familiares tienen un módulo de enseñanza dedicado a la familia. Sin embargo, creemos que este debe ser revisado, actualizado y contar con alguna actividad práctica. Para el futuro se está pensando en el uso de instrumentos de detección comunitaria de afección familiar. Hay numerosos tests y cuestionarios, la mayoría bastante fiables pero aún no se generaliza su empleo. En cuanto a los criterios de relacionar el funcionamiento familiar con el diagnóstico de entidades individuales, nuestros médicos familiares, día tras día, hacen, al menos de forma empírica, tal ejercicio. El interés nuestro es que seamos capaces de integrar ese proceder como un aprendizaje científico y regular.